Cada año las pequeñas
princesas me piden que les haga un calendario, donde por
una parte está el mes correspondiente y por la otra una foto que ellas han
elegido. Y cómo no, este hecho se ha convertido en una tradición y ya reclaman
su calendario nuevo a
principios del mes de diciembre.
Para la ocasión la
pequeña princesa eligió los adornos y los papeles de la colección Wonder
de Crate Paper. Los animalitos, las casitas, los corazones… le robaron el
corazón desde el momento en que entraron en casa.
Como complementos,
muchas maderitas, cintas, decoraciones por todas partes… todo ello para
conseguir el calendario 2016 más gordito
del mundo mundial, jajaja
La pequeña princesa
está encantada y disfruta tachando los días y viendo la foto que le depara el mes
siguiente, y para mi eso es lo más importante.
¿Y vosotr@s,
os hacéis calendarios personalizados cada año?
¿Os gusta
que cada mes tenga una foto diferente?
Contadme.